"¿10.000 pasos al día? ¡Mejor coger margaritas!": Un médico deportivo reinicia los podómetros.

Pero, ¡santo cielo!, ¿quién decretó que caminar 10.000 pasos al día era beneficioso para la salud? ¿Quién inventó esta cifra avalada por la Organización Mundial de la Salud (OMS)? El Dr. Daulouède se ríe a carcajadas: «Investigadores japoneses, durante un estudio completamente sesgado, encargado en la década de 1960 en Japón por vendedores de podómetros, establecieron esta regla de los 10.000 pasos. Por lo tanto, es falsa. Se aplicaba a un fenotipo asiático, no a nuestro fenotipo caucásico. Corresponde aproximadamente a una hora y media de caminata, o 7 kilómetros. A lo largo de los años, y más aún en los últimos cinco años, esta pseudoregla de los 10.000 pasos se ha utilizado para vender aplicaciones en nuestros teléfonos y podómetros en relojes inteligentes: en el ámbito de la salud, lo llamamos el efecto "oro". Pero entiendan que no es tanto la cantidad de pasos lo que cuenta, sino cómo los damos».

Los 10.000 pasos son una meta que se ha convertido en parte de las costumbres actuales, especialmente entre los habitantes urbanos y, en especial, entre los jóvenes jubilados. Sin embargo, un estudio de 2021, citado por la revista estadounidense de consumo " Consumer Reports" , estima que los beneficios en la circunferencia de la cintura, el colesterol, la presión arterial y el azúcar en sangre solo son palpables a partir de 15.000 pasos al día. ¡Menuda maravilla! «Porque», comenta el Dr. Daulouède, «caminar es una característica humana, una función básica y fundamental. Esta regla de los 10.000 pasos, que no es una regla, debería asociarse con la conducta al caminar. Me explico: 10.000 pasos sin bastón, caminando a paso ligero para subir la Rhune en el País Vasco, no tiene nada que ver con 10.000 pasos, incluso sin bastón, para caminar a Mirza... El esfuerzo físico no es el mismo. Por lo tanto, la noción de 10.000 pasos no debería usarse como referencia, a pesar del éxito de los relojes inteligentes. Caminar despacio no tiene mucho efecto en la salud física.

“La gente que camina es más inteligente que la que no lo hace, ¡pero físicamente es otra historia!”

Pero tiene algo que ver con la salud mental, psicológica y filosófica. Así dijo Nietzsche: «Solo los pensamientos que surgen al caminar valen algo». Y también Kierkegaard, también un gran caminante ante lo Eterno: «Sobre todo, no pierdas las ganas de caminar. Para mí, caminar me proporciona bienestar diario y me protege de la enfermedad; mis mejores pensamientos han surgido caminando, y no conozco ningún pensamiento tan pesado que uno no pueda alejarse de él a grandes zancadas». Platón y Aristóteles filosofaban mientras caminaban. Con o sin Mirza. Y el propio Dr. Christian Daulouède no desdeña el simple placer de caminar y sus virtudes relajantes. «Es cierto, quienes caminan son más inteligentes que quienes no caminan, pero en lo físico», dice, «¡esa es otra historia!».

Tras esta decepcionante observación, el médico ofrece algunas soluciones. «Si queremos mejorar nuestra salud y condición física, y perder peso, es mejor abandonar el ritmo del caminante dominguero y preferir el ritmo del cazador, una caminata rápida que nos hace sudar, con subidas y bajadas, con el corazón acelerando y desacelerando. La frecuencia cardíaca debe cambiar, y entonces, sí, sabemos que el nivel de colesterol bajará, que el corazón se estimulará, las articulaciones, los músculos. Quienes caminan rápido al hacer senderismo, a paso ligero, mejoran su salud».

Dado que no todos tienen tiempo para dar 15.000 pasos diarios de una sola vez, el médico recomienda escalonar el esfuerzo. «La idea es quemarse el aliento. Si caminas a paso ligero durante mucho tiempo, quemas calorías, y estas siguen quemándose por la noche mientras duermes. También les recuerdo que caminar a paso ligero es un excelente ejercicio para las personas con Alzheimer; este esfuerzo ralentiza los síntomas. Quienes padecen artrosis de rodilla o cadera nunca deben dejar de caminar a paso ligero; el cartílago se nutre del líquido sinovial que se estimula al caminar».